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Ahora bien, la manera de integrar
un estudio de mercado puede hacerse con distintos medios documentales. Por una
parte, es necesario recopilar información existente sobre el tema, desde el
punto de vista del mercado. A esto se le llama información de fuentes secundarias
y proviene, generalmente de instituciones abocadas a recopilar documentos, datos
e información sobre cada uno de los sectores de su interés. Las Cámaras Industriales
o de Comercio de cada ramo son las que reciben información directa de sus agremiados
y publican informes y estadísticas sobre los sectores productivos de su competencia.
A la par, órganos oficiales como el Instituto Nacional de Estadística, Geografía
e Informática, los bancos de desarrollo como Banco Nacional de Comercio Exterior,
S.N.C., Nacional Financiera, S.N.C. y la propia banca comercial publican regularmente
información estadística y estudios sobre diversos sectores de la economía en
donde se puede obtener las características fundamentales de las ramas de interés
para el inversionista potencial.
Por otra parte, la información primaria es aquélla investigada precisamente
por el interesado o por personal contratado por él, y se obtiene mediante entrevistas
o encuestas a los clientes potenciales o existentes o bien a través de la facturación,
para los negocios ya en operación, con el fin de detectar algunos rasgos de
interés para una investigación específica. A través de un ordenamiento de preguntas
debidamente encauzadas con el fin de abarcar una visión clara de algunos puntos
precisos de su interés, se recibe una respuesta concreta sobre determinados
temas que ayuden a conocer ciertas características indispensables de los bienes
o servicios por vender.
Con la combinación de estos dos medios, es como se conjunta la información necesaria
para el procesamiento, análisis de los datos recabados y con ello elaborar un
estudio de mercado.
Adicionalmente, se debe tener presente que los productos y los servicios atraviesan
un ciclo ocasionado por la respuesta del consumidor. Este ciclo consta de cinco
partes que son las siguientes:
- Introducción
- Crecimiento
- Madurez
- Saturación y
- Abandono
Es evidente que cierto tipo de
servicios no entra obligatoriamente en el ciclo antes descrito, no obstante
sí debe tenerse en cuenta el comportamiento del consumidor.
En la gráfica siguiente se ilustra el ciclo que varía en función de los productos
y de su exposición a los dictados de la moda.
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